MENÚ DESPLEGABLE

TRADUCCIÓN A OTROS IDIOMAS - TRANSLATION TO OTHER LANGUAGES

jueves, 9 de abril de 2015

LOS PARTIDOS POLÍTICOS HAN CREADO UN VACÍO HISTÓRICO Y COYUNTURA NACIONAL





CON LA DESAPARICIÓN DE LOS PARTIDOS POLÍTICOS HAN CREADO UN VACÍO HISTÓRICO Y COYUNTURA NACIONAL

La coyuntura nacional actual está atravesada por diversos dilemas que deben ser pensados en el sentido más holístico posible. Pues de otro modo podemos terminar dibujando un panorama con variables que no son relevantes para la acción política. Con eso nos referimos a personalizar el análisis desde sólo lo visible, y no las cosas que están detrás de ello.

Cuando hablamos de Refundación Democrática cómo estrategia del periodo político que vivimos estamos hablando de tener en cuenta la contradicción central en éste momento histórico de nuestro país. Esa contradicción central es entre democracia neoliberal –esta que conocemos y vivimos- y democracia popular. No es menor perder de vista aquello. Pues las fuerzas sociales bregamos por resolver la contradicción del periodo con el triunfo de un proyecto de amplias mayorías. Triunfo no electoral -no sólo electoral para ser exactos- sino triunfo en la hegemonía del proyecto de país, de los valores, de los sentidos comunes, de la construcción de la patria nueva.

Éste proyecto se basa en realidad entera, alejarnos de ella deja de ser política y nos coloca en el plano de la pura imaginación. La situación en la que nos encontramos es una en la que las fuerzas sociales se encuentran estratégicamente en reflujo, las fuerzas organizativa de los trabajadores en los sectores estratégicos de la economía por poner un ejemplo. Si bien es cierto que hay resistencias dignas en varios puntos de nuestra patria en general podemos señalar que luego de la dictadura y la implantación del modelo neoliberal las fuerzas sociales han configurado lo que podemos llamar un ‘Vacío Histórico’ , pues hay una evidente incapacidad política por contrarrestar los avances de los sectores ultraneoliberales. Llámese la Derecha Fujimorista y aprista. Tan es así que el 2016 se prevé una disputa entre Alan Garcia y Keiko Fujimori. La derecha pura. La derecha militarista. El paso previo al fascismo.

Este ‘vacío histórico’ por parte de las fuerzas sociales ha llevado a la izquierda en su conjunto a los márgenes de la vida nacional. En la centralidad de los temas nacionales la izquierda está ausente. En los sectores popular la derecha tiene el control total vía el asistencialismo. Ante ello las fuerzas sociales no tienen ningún peso para poder enfrentarlas. Además de todo ello también en el Perú el poder ha ido fragmentándose. Esto tiene que ver –falta analizar qué tan profundos son sus vínculos- entre la tensión irresuelta en el Perú. La de Etnia/clase. Las burguesías emergentes que vienen de una matriz cultural indígena (dependiendo de cada caso podemos ver el grado generacional), que sin orientación alguna de las fuerzas sociales se han acomodado al sistema neoliberal y actúan dentro de él o a los márgenes del mismo, veamos los casos de contrabando masivo en el sur. Estas burguesías en términos económicos son igual a las burguesías tradicionales, sin embargo las diferencias culturales y algunas otras más como el regionalismo, etc. las pone en disputa. Todo ello sucede fuera de los límites discursivos y programáticos de las fuerzas sociales. Por ello podemos hablar de un vacío histórico en este periodo que deviene desde poco antes del Golpe de 1992.

Ante este panorama es innegable que necesitamos construir una estrategia de periodo, y necesitamos construir organización, reconstruir el tejido social luego de más de 20 años. Devolver la esperanza. Construir un proyecto para las amplias mayorías. Es muy importante eso: un proyecto para las amplias mayorías. No estamos hablando de un proyecto con banderas que identifiquen únicamente a las clases medias y que se restrinjan a ser asimiladas sólo en esos espacios. Sino a un proyecto que apunte a resolver las contradicciones pendientes históricamente y a salir de este vacío histórico. Que pueda llegar a los sectores populares y desde ahí poder atraer a las clases medias. Un proyecto que sea cotidiano, pasional, en la idea mariateguista. Un proyecto para las amplias mayorías.

Regresando entonces a tener claro que la contradicción principal en este momento es el neoliberalismo, y caracterizando la sociedad actual, y la situación de las fuerzas sociales nos tenemos que hacer la pregunta ¿qué toca hacer en la coyuntura del 2016?

La respuesta es sencilla. Usar la coyuntura electoral -en términos de que es necesario enfrentar al neoliberalismo por todos los medios- para disputar una propuesta y crecer. Sin embargo, esto tiene una condición irrenunciable: Se tiene que articular estrategia de periodo y programa, y forjar unidad –un gran bloque frente al neoliberalismo- para afrontar la coyuntura de manera que permita esencialmente salir de este vacío histórico e ir construyendo un proyecto para las amplias mayorías. Pero ojo que estrategia de periodo tiene que abordar elementos estratégicos de discusión de poder, de fuerzas estratégicas, de inserción a sectores estratégicos, de crecimiento y formación de dirigentes en el campo popular, de una autentica renovación de la izquierda, etc. En otras palabras, abordar la coyuntura sin dejar de construir el largo plazo. Ésto no es sólo unirse para postular. La política no es eso, es disputa de poder y es cuestionamiento al viejo orden.

Sin embargo el panorama actual está muy lejos de parecerse a algo que resulta ser de sentido común entre las fuerzas de izquierda, que a contrario de lo que uno pensaría no es de sentido común.



FUENTE: VÍCTOR CÁRDENAS

No hay comentarios:

Publicar un comentario