7.000 NIÑOS DETENIDOS, MALTRATADOS Y
HUMILLADOS POR EL EJÉRCITO ISRAELÍ.
Crecer en
los Territorios Ocupados Palestinos no es fácil. Cuando te vas a la escuela, tu
madre no puede estar segura de cuando volverás. Puede que esa tarde, puede que
un año después.
Un paseo
con tus amigos puede acabar en interrogatorio de la policía. Cualquier noche,
un grupo de soldados puede presentarse de madrugada en tu casa y llevarte -a
ti, a tu hermano, a tu padre o a todos juntos- a la cárcel, después de maniatarte y vendarte los ojos delante de tu familia.
No es
necesario que hayas hecho nada especial, solo estar allí, ser un niño.
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