Informe presentado en el XIX Congreso
Internacional sobre Acústica, realizado en Madrid (España), ……………………..
Asimismo, se comprobó que circulan
vehículos con tubos de escape modificados y que los choferes hacen uso excesivo
del claxon. Otra fuente de contaminación por ruidos es la causada por el
transporte aéreo, debido a la proximidad del aeropuerto a la zona urbana.
Por otro lado, las actividades
sociales en las zonas más humildes de las ciudades suelen utilizar equipos de
sonido a gran volumen, causando molestias a los habitantes de las viviendas
cercanas.
Los megáfonos utilizados por el
comercio ambulatorio también causan una gran contaminación por ruidos, los
motores y maquinaria (al interior de las industrias), construcciones
arquitectónicas y reparaciones de carreteras (taladros, neumáticos, grúas,
mezcladoras, etc.), música estrepitosa (discotecas, fiestas, vendedores
ambulantes, etc.), aparatos domésticos, explosiones (minería, petróleo,
construcción civil, etc.).
Como respuesta a los problemas
existentes sobre ruidos a nivel nacional, se ha aprobado el Decreto Supremo Nº
085-2003-PCM, donde se establece el Estándar Nacional de Calidad Ambiental para
Ruido y define los lineamientos para no excederlos con el objetivo de proteger
la salud, mejorar la calidad de vida de la población y promover el desarrollo
sostenible.
Ruidos
Las informaciones recientes señalan
que Lima, es una de las ciudades con mayor crecimiento de agentes productoras
de sonidos y ruidos, y que éstos tienen una variedad, intensidad y
perdurabilidad. Todos ellos constituyen una forma de contaminación física.
Las principales actividades económicas
con un correlato de generación de ruidos, son:
· El transporte
· La industria
· La actividad de la construcción.
Tal vez esta última es una de las más
importantes en la economía del país, pero también una importante consumidora de
recursos, fuente de residuos y de contaminación acústica. Es por eso que el
vertiginoso proceso de urbanización ha acrecentado una nueva preocupación
ambiental: el ruido.
El aumento sistemático de la
actividad de la construcción en nuestro país, en respuesta al crecimiento
demográfico, con la consiguiente demanda de servicios públicos, transporte y la
pérdida de áreas verdes; genera impactos nocivos en la calidad de vida de sus
habitantes.
Tradicionalmente el ruido era
considerado como la fuente de contaminación más inofensiva, ya que, a
diferencia de otros agentes, sólo se percibe por un sentido y sus efectos son
menos inmediatos. Es, sin embargo, uno de los contaminantes más invasivos que
se encuentran en la atmósfera.
La contaminación acústica posee en
ella misma una serie de inconvenientes que dificultan su control. Los expertos
coinciden al afirmar que es muy difícil escapar a su nocividad y a los
desequilibrios que comporta. En el ámbito urbano, rural, laboral, social,
educativo e incluso en el hogar, la contaminación acústica consigue interferir
en la vida del ser humano provocándole dificultades de atención y de
concentración, sin olvidar su contribución al estrés nervioso y a la alteración
del sueño, entre otros efectos auditivos y extra auditivos.
En la construcción de
infraestructuras y edificios tanto públicos como privados se olvidan, con
frecuencia, las medidas necesarias para reducir al mínimo posible el impacto
acústico. Así, no se introducen los oportunos controles de niveles de ruido
durante la fase de construcción o demolición de edificios, para reducir al
mínimo las molestias. Sobre todo si la construcción se realiza en horario
nocturno, donde para zonas de protección especial, residencial, oficinas,
centros de investigación debe estar prohibido.
Efectos en la salud de las personas
El oído humano está constituido de
tal manera que sólo puede soportar sin daño una carga acústica que se encuentre
dentro de unos parámetros muy determinados. Sin embargo, uno de los problemas
de la contaminación sonora es que cuando detectamos los primeros síntomas de
daños, ya se han producido trastornos en nuestro organismo.
La sordera o hipoacusia
Aparece con niveles de 90 dB y
superiores mantenidos. Una razón por la cual la gente no nota el daño que el
ruido produce es porque la exposición excesiva al ruido causa pocos síntomas.
La pérdida de la audición rara vez es dolorosa. Pero si el daño continúa, la
audición disminuye aún más y los sonidos de tono bajo se vuelven difíciles de
entender.
Las pérdidas de audición ocasionadas
por el ruido constituyen los efectos más conocidos de éste sobre la salud
humana. El problema se produce cuando la exposición a niveles sonoros excesivos
se repite de manera que el oído no puede descansar; es decir, no tiene tiempo
de recuperarse entre una exposición y la siguiente.
Si esta situación se mantiene durante
un tiempo prolongado, generalmente del orden de años, llega a aparecer una
lesión irreversible en el oído, lo que se denomina hipoacusia. El riesgo de
daño auditivo se considera existente a partir de exposiciones mantenidas a
niveles por encima de 75 dB, por sonidos de corta duración de más de 110dBA, o
bien, por acumulación de fatiga auditiva sin tiempo suficiente de recuperación
(García 2002).
Como se señaló anteriormente, en el
desplazamiento temporal de lumbral auditivo aún no hay lesión. La recuperación
es normalmente casi completa al cabo de dos horas y completa a las 16 horas de
cesar el ruido, sólo si se permanece en un estado de confort acústico (menos de
50 dB en vigilia o de 30 dB durante el sueño.
Por otro lado, hasta un 82 por ciento
de las personas que han estado en una discoteca con mucho ruido experimenta
desplazamientos del umbral auditivo y nota cómo su capacidad de audición se ha
deteriorado. Y un 76 por ciento de las personas que acuden a discotecas menos
ruidosas también experimenta síntomas similares (Tin y Lim 2000).
Otros efectos o consecuencias que
produce el ruido sobre la salud además de los auditivos incluyen: trastornos
psicológicos (conductas de irritabilidad y agresividad, estrés); fisiológicos
(aumento de la frecuencia cardiaca, la presión arterial y la frecuencia
respiratoria); alteraciones del sueño y del descanso, lo que conduce a la falta
de atención y aprendizaje, somnolencia diurna, cansancio y bajo rendimiento.
La perturbación del sueño con sus
consecuencias notables en la actividad diaria es uno de los principales efectos
de este problema en la calidad de vida de la población de Lima.
La sensación de malestar
Procede no sólo de la interferencia
con la actividad en curso o con el reposo, sino también de otras sensaciones
menos definidas pero a veces muy intensas de estar siendo perturbado.Las
personas afectadas hablan de intranquilidad, inquietud, desasosiego, depresión,
desamparo, ansiedad o rabia.
El nivel de malestar no varía
solamente en función de la intensidad del ruido, sino también de factores tales
como miedos asociados a la fuente del ruido o el grado de legitimación que el
afectado atribuya a la misma. Si el ruido es intermitente influyen también la
intensidad máxima de cada episodio y el número de éstos (Hansen, 1996; Pereira,
2002).
El nivel de presión sonora que genera
una conversación moderada, a un metro del locutor, es entre 50 dB y 55 dB.
Hablando a gritos se puede alcanzar a 75 dB(A) u 80 dB(A). Por otro lado, para
que un mensaje oral posea una inteligibilidad del 80% se requiere que éste
supere en alrededor de 12 dB al ruido de fondo (Meyer Sound, 2006).
Un ruido de fondo con niveles
superiores a 40 dB provocará dificultades en la comunicación oral que sólo
podrán resolverse, parcialmente, elevando el tono de voz. A partir de 65 dB de
ruido, la conversación se torna extremadamente difícil. Por ejemplo, en
establecimientos educacionales cercanos a vías con un alto tránsito vehicular,
aeropuertos o zonas industriales, se ha detectado un retraso en el aprendizaje
de la lectura. Además, en ciertos casos las consecuencias serán duraderas, por
ejemplo, los niños sometidos a altos niveles de ruido durante su edad escolar
no sólo aprenden a leer con mayor dificultad sino que también tienden a
alcanzar grados inferiores de dominio de la lectura (Tolosa 2003).
Para lograr una buena comunicación
entre el profesor y los alumnos, es básico que el ruido de fondo no supere los
55 dB; sin embargo, este nivel suele ser superado ampliamente (colegios
ubicados en el centro de la capital están expuestos a 60 dB y, en algunos
casos, a 70 dB.
Todo ello, contribuye también, al
desgaste de las cuerdas vocales, sordera por exposición acumulativa al ruido y
síntomas relacionados con el estrés, la irritabilidad, pérdida de concentración
y fatiga en los profesores (Lacaste, 2005).
Los trastornos del sueño
Los efectos del ruido sobre el sueño
se pueden clasificar en tres grupos principales, según su momento de aparición:
· En primer lugar, el ruido puede
producir interferencias sobre el mecanismo normal del sueño en términos de
dificultad para su inicio, alteraciones del patrón o intensidad del sueño e
interrupciones del mismo. Este conjunto de efectos se denominan alteraciones
primarias del sueño.
Se incluyen también otros efectos
primarios de naturaleza nerviosa vegetativa, tales como aumento de la presión
arterial, aumento del ritmo cardiaco, arritmia cardiaca, vaso constricción,
cambios en la frecuencia respiratoria y movimientos corporales.
· Los efectos que aparecen la mañana o
el día después de la exposición al ruido durante el sueño se denominan
alteraciones secundarias, e incluyen reducción en la calidad percibida del
sueño, fatiga, modificaciones del carácter y el comportamiento y alteración del
bienestar y de la actividad general.
· Por último, se ha señalado también
la posible existencia de efectos a largo plazo, menos conocidos, que pueden
manifestarse después de largos periodos de exposición al ruido durante el
sueño. Potencialmente, puede ser la aparición de enfermedades funcionales que
con el tiempo pueden llegar a establecerse como enfermedades orgánicas
progresivas e irreversibles. En relación con todo ello, se ha recomendado que
durante la noche los niveles sonoros equivalentes (Leq) exteriores no deben
sobrepasar los 45 dB (García, 2002).
El estrés
Es una reacción inespecífica ante
factores agresivos del entorno físico, psíquico y social. En principio, se
trata de una respuesta fisiológica normal del organismo para defenderse ante
posibles amenazas.
Sin embargo, si esta reacción se
repite o resulta sistemáticamente inefectiva puede llegar a agotar los
mecanismos normales de respuesta, produciéndose un desequilibrio en los mismos
que, con el tiempo, puede manifestarse en forma de diferentes alteraciones de
la salud.
Se han relacionado con la reacción
del estrés, diversas enfermedades cardiovasculares, alteraciones del aparato
digestivo, alteraciones del sistema inmunitario de defensa o del sistema de
reproducción, por citar sólo algunos ejemplos.
El ruido ambiental puede actuar como
cualquier otro agente estresante. Aunque se han estudiado diferentes efectos
del ruido mediados por la reacción de estrés, varios grupos científicos
coinciden en el reconocimiento del ruido como un factor más de riesgo
cardiovascular, como pudieran ser otros agentes tales como el tabaco o la
dieta.
Se ha estimado que los trabajadores
expuestos permanentemente a niveles de ruido elevados (>85 dB) presentan un
mayor riesgo de padecer afecciones cardiovasculares que los no expuestos.
Una exposición a niveles menores
(>65 dB) en determinadas condiciones (por ejemplo, mientras se intenta
descansar o concentrarse) puede también desencadenar una reacción de estrés en
el individuo, aunque los efectos a largo plazo de esta reacción son menos
conocidos (Hansen 1996, García 2002).
Por último, cabe mencionar que la
combinación de todos los factores anteriormente descritos ha convertido en
inhóspitas muchas ciudades, deteriorando en ellas fuertemente los niveles de
comunicación y las pautas de convivencia. En consecuencia, hay baja
productividad laboral, la disminución de los ingresos por turismo de ciertas
ciudades históricas, los daños materiales producidos en edificios por sonidos
de baja frecuencia y vibraciones, etc. (Tolosa 2003)
INFORME OBTENIDO DEL DOCUMENTO: Diagnóstico Técnico Participativo del Plan Regional de
Desarrollo Concertado de Lima al 2025
NOTA: Según los estudios publicados, la "Alameda de los Incas" de la Urbanización Tahuantisnuyo, cumple la función de amortiguamiento ante la contaminación sonora: El metropolitano, la utopista Tupac Amaru etc..., sin ella los vecinos de la zona sufrirían serios problemas de Salud Acústicos. Exhortamos al Alcalde del Distrito de Independencia desestime dicho proyecto, porque afectaría su salud acústica, por ser vecino cercano a la Alameda.
INDEPENDENCIA VECINOS EXIGEN QUE NO
SE VENDA LA ALAMEDA LOS INCAS
NOTA: Según los estudios publicados, la "Alameda de los Incas" de la Urbanización Tahuantisnuyo, cumple la función de amortiguamiento ante la contaminación sonora: El metropolitano, la utopista Tupac Amaru etc..., sin ella los vecinos de la zona sufrirían serios problemas de Salud Acústicos. Exhortamos al Alcalde del Distrito de Independencia desestime dicho proyecto, porque afectaría su salud acústica, por ser vecino cercano a la Alameda.
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